Marketing para Vender Más (30 Palabras Poderosas.
Más: La palabra “MÁS” es utilizada para darle fuerza a propuestas de valor centradas en magnitudes especificas; por ejemplo: “más grande”, “más cerca”, “más barato”. Pero, también puede utilizarse en llamados a la acción haciendo referencia a que el cliente obtendrá resultados significativos; por ejemplo, “Consigue más clientes para tu negocio con
Oferta: Si bien el mercado está saturado de empresas gritando ofertas y promociones, no dejan de ser palabras muy efectivas para capturar la atención de los clientes. Pero, si vas a hacer una oferta o promoción, estas funcionan mucho mejor como herramienta de fidelización, es decir, para ofrecerle a tus clientes más fieles beneficios exclusivos. O, si vas a hacer una oferta como herramienta de atracción, procura que esta sea muy buena para que genere voz a voz y puedas vender productos complementarios a los clientes que se sientan atraídos por la oferta. Todo es cuestión de estrategia; las ofertas sin estrategia le salen muy caras a tu negocio.
Fácil: La facilidad de uso e implementación es un diferencial determinante en varias industrias. Los clientes no quieren complicarse la vida, así que crea soluciones simples y efectivas, y asegúrate de comunicar esa facilidad con un mensaje contundente. Por ejemplo, en sectores como el de productos para el hogar o productos tecnológicos para personas adultas, los clientes siempre van a optar por productos fáciles de utilizar.
Descubre: A los seres humanos nos encanta el misterio, y la palabra “DESCUBRE” es perfecta para abrir paso a mencionar esas características o beneficios de nuestro producto que pueden sorprender hasta al cliente más escéptico. Por ejemplo, “descubre el auto más cómodo y seguro del mercado, con x característica que te permitirá disfrutar de viajes placenteros y sin preocupaciones, en compañía de quienes amas”.
Efectivo: Los clientes quieres obtener el mejor resultado con el menor esfuerzo posible, es decir, quieren efectividad. Ofrecer propuestas de valor enfocadas en la efectividad es especialmente atractivo para clientes profesionales y empresariales, pues ellos constantemente están buscando la manera de optimizar su productividad.
Seguro: La seguridad es fundamental en sectores como el financiero, sin embargo, sea cual sea tu negocio, garantizar la seguridad del cliente es un elemento muy atractivo. Además, la seguridad se puede complementar muy bien con otros atributos como la eficiencia y la practicidad; por ejemplo, las plataformas de pagos online usan propuestas de valor tipo “la forma más fácil, rápida y segura de enviar y recibir dinero por Internet”.
Nuevo: Solemos asociar la palabra “NUEVO” con conceptos como innovación y desarrollo. Nos encanta ver nuevos conceptos y nuevos productos. Esta palabra funciona especialmente bien en estrategias de rejuvenecimiento de la marca o para comunicar funcionalidades que se han añadido a nuestro producto para mejorar su rendimiento.
Oportunidad: Nadie quiere dejar pasar las oportunidades que se le presentan, por lo que usar esta palabra apela a la sensación de escasez y persuade al cliente para que tome una pronta decisión.
Limitado: Apelando también a la sensación de escasez, usar la palabra limitado hace que el cliente sienta que debe tomar rápidamente la decisión de compra. Puedes usarla en frases como: “por tiempo limitado” o “cantidades limitadas”.
Sin riesgo: Incluir en tu propuesta de valor garantías de satisfacción y políticas de devolución, hace que el cliente disipe esos temores que puedan impedirle comprarte. Cuanto menos riesgo sienta tu cliente a la hora de comprar, mayor será la posibilidad de concretar la venta.
Ahora mismo: En ocasiones hacemos una muy buena labor capturando la atención del cliente, pero nos cuesta persuadirlo para que tome acción. Frases como “ahora mismo”, “ya mismo” o “en este momento”, funcionan muy bien para dar la puntada final y llevar al cliente a realizar acciones concretas como llamar, dar clic en un botón o realizar un pedido.
Sin compromiso: Algunos clientes suelen poner barreras ante el vendedor para evitar pasar por la pena de decirle luego que no. Una excelente manera de romper estas barreras es hacer énfasis en que puede hacer preguntas o probar el producto sin compromiso, así se mostrará más receptivo y le permitirá al vendedor exponer sus argumentos.
Recomendado: Solemos confiar más en los productos y servicios cuando estos son recomendados por personas de referencia. Por ejemplo, las marcas de crema dental usan mucho comerciales del tipo “la crema más recomendada por odontólogos”. También, esta palabra puede usarse en estrategias más personalizadas; por ejemplo, dando beneficios a los clientes si ellos nos recomiendan frente a sus amigos y conocidos, generando así un marketing de referenciación.
Rápido: La eficiencia es una de las características de servicio más apreciadas por los clientes. Queremos las cosas ya, de inmediato. No queremos esperar. Si puedes reducir significativamente el tiempo que le toma al cliente esperar para tener el producto en sus manos o para resolver su problema, ahí tienes una característica muy poderosa y atractiva.
Resultados: En esencia, todos adquirimos productos y servicios esperando obtener resultados concretos. Entiende cuál es ese resultado que busca tu cliente y enfoca tu estrategia de comunicación en él. Por ejemplo, algunas marcas de productos fitness usan frases como “resultados desde la primera semana”. Es una forma muy efectiva de comunicar tu propuesta de valor.
Ganar: Todos queremos ganar; es parte de la naturaleza humana. ¿Qué puedes ofrecer a tus clientes para que sientan que están ganando algo por comprarte a ti? Convierte los beneficios de tu producto en una especie de trofeo; por ejemplo: “gana más tiempo y libertad” o “gana más tranquilidad”. También, la palabra puede usarse de manera más directa para que el cliente obtenga recompensas por sus compras; por ejemplo: “gana x puntos por tus compras este mes” o “con tus compras durante este mes podrás ganar x premio”.
Sin costo: Diversos experimentos han evidenciado que una de las principales razones por las que los clientes abandonan una compra, es por la aparición de costos inesperados al momento de pagar; por ejemplo, cuando ya estás listo para realizar el pago y te das cuenta que debes asumir un costo adicional por el envío. Una buena estrategia es ofrecer el envío sin costo a partir de determinado volumen de compras, así aumentas el nivel de conversión de tu modelo de negocios y el promedio de ingresos por cliente. Otros beneficios que el cliente aprecia recibir sin costo, son la instalación del producto y soporte técnico postventa. Lo importante es tener bien claros tus costos para que esta estrategia no termine afectando la rentabilidad de tu negocio.
Disfruta: La palabra “DISFRUTA” es una invitación a que el cliente sueñe con el producto o servicio que le estamos ofreciendo. Esta palabra ayuda a que el cliente mentalmente cree un escenario imaginario en el que él está interactuando con el producto. Por ejemplo, sectores como el de los hoteles, viajes y restaurantes, usan esta palabra en frases como: “disfruta de las vacaciones que te mereces” o “disfruta de deliciosos platos de comida internacional”.
Comprobado: Los clientes no quieren improvisar; ellos quieres soluciones validadas. La palabra “COMPROBADO” apela a esa necesidad que tenemos de saber que estamos tomando la decisión correcta. Confiamos más en los productos que nos garantizan resultados comprobados. Por ejemplo, frases como “método comprobado” o “estrategias comprobadas”, son muy utilizadas en sectores como el de la salud o la educación. Sin embargo, no está de más resaltar que uses con prudencia este concepto, pues es muy delicado ofrecer resultados comprobados sin contar con la validación respectiva.
Ahorra: La palabra “AHORRO” es interpretada por la mente humana como el dejar de perder, y existen básicamente tres cosas que no nos gusta perder: tiempo, energía y dinero. Los productos y servicios enfocados en permitirle al cliente ahorrar tiempo, esfuerzo y dinero, logran altos niveles de ventas recurrentes, pues estos ayudan a que el cliente entre fácilmente en una zona de confort.
Garantía: La palabra “GARANTÍA” funciona como un atajo mental que conforta a nuestro cerebro, haciéndole sentir mayor seguridad y confianza a la hora de comprar. Este concepto se puede usar de dos formas: mencionando que los resultados del producto son garantizados o añadiendo políticas de garantía en caso de que el cliente tenga problemas posteriores con el producto.
Recuerda: Esta palabra suele utilizarse bastante en los llamados a la acción; por ejemplo: “recuerda descargar tu PDF gratis desde el botón de aquí abajo”. Pero, también se usa para cerrar ventas generando sentido de urgencia; por ejemplo: “recuerda que este beneficio solo estará disponible hasta mañana en la tarde”.
Imagina: A través del discurso de ventas es importante llevar al cliente desde lo racional hasta lo emocional, y la palabra “IMAGINA” es muy efectiva para evocar emociones significativas. Por ejemplo, sectores como el de viajes hacen grandes esfuerzos para que los clientes imaginen que están disfrutando de ese lugar soñado con su pareja o su familia.
Inmediatamente: Esta es otra palabra que busca crear sentido de urgencia, por lo que suele utilizarse bastante en llamados a la acción y para cerrar ventas. Por ejemplo, en botones de formularios de captación de leads puedes usar frases como: “Envíame mi PDF inmediatamente”.
Lograrás: Todos compramos productos y servicios esperando resolver problemas concretos, así que funciona muy bien explicarle al cliente justamente cómo puedes ayudarlo a través de tu propuesta de valor. Por ejemplo: “Con este curso lograrás x objetivo”. Es importante que el logro planteado sea muy específico y atractivo.
Ayudará: Cumple una función similar a la palabra anterior. Suele utilizarse en estrategias de atracción de clientes. Puedes usarla también con variaciones como “TE AYUDARÉ”, buscando humanizar la propuesta de valor para hacerla más cercana al cliente y que este perciba mayor compromiso de tu parte. Por ejemplo, “Con mi servicio, te ayudaré a lograr x objetivo”.
Regalo: Nos encantan los regalos. Incluir elementos de valor en forma de regalo ayuda a atraer clientes o a cerrar ventas. Por ejemplo, “lleva este producto hoy mismo y te regalo x beneficio”.
Solución: La palabra por sí misma es muy diciente. Los clientes quieren soluciones, entonces comunica qué problema quieres resolver y cuál es esa solución que propones. Por ejemplo: “Deja de sufrir con x problema, esta solución te permite lograr tu objetivo sin complicaciones”.
Entiendo: La empatía es una de las características más importantes de todo vendedor, y esta palabra es perfecta para transmitir dicha empatía. “ENTIENDO” funciona muy bien para responder a las objeciones de los clientes; por ejemplo: “Entiendo que pueda parecerte caro, pero puedo proponerte esta solución”. También, puede usarse para crear escenarios imaginarios en los que el cliente se sienta identificado; por ejemplo: “Entiendo que en ocasiones puedas salir cansado del trabajo, por eso quiero ofrecerte este producto”.
¿Sabías qué…?: Esta frase ayuda a despertar la curiosidad del cliente. Al cerebro le encanta aprender, por lo que decirle: “¿Sabías qué…?”, hará que se torne más receptivo con lo que vas a decirle, entonces ahí puedes mencionar alguna característica destacada del producto que le estás ofreciendo; por ejemplo: “¿Sabías qué este auto es el más eficiente del mercado, permitiéndote recorrer más kilómetros con menor consumo de combustible que ningún otro?”.
Autor Javier Díaz.